Evaluación: hoja de registro.

Hoja de registro. 

La evaluación es imprescindible en cualquier etapa educativa, concretamente en educación infantil es fundamental conocer las capacidades de los niños y niñas. Por ello he preparado unas tablas de registro dónde poder anotar las observaciones sobre lo examinado.

En la evaluación, se replantean los objetivos o cualquier otro elemento del proceso educativo. En educación infantil se pretende señalar el grado en que se van alcanzando las distintas “capacidades” del niño/a. No obstante, la evaluación ha de valorar el proceso enseñanza/aprendizaje, no sólo si lo ha conseguido o no, sino la evolución del menor.

Es importante evaluar adaptándose a las necesidades y el desarrollo de nuestros menores teniendo en cuenta que existen ítems de obligatorio cumplimiento para todos.


A finales de los 70, y durante los 80 se comenzó a utilizar la hoja de registro para disminuir problemas de comportamiento, o aumentar la cantidad de trabajo en el aula.

La hoja de registro, en la actualidad, consiste en evaluar una serie de ítems propios a la edad correspondiente. Hablamos de un instrumento de evaluación con el que a través de la técnica de la observación concretaremos la información obtenida.


Por todo ello, podremos ver  a continuación un ejemplo de hoja de registro para el aula de niños/as de 2-3 años, con una serie de ítems adecuados al nivel evolutivo correspondiente,  los cuales evaluaremos como conseguido o no conseguido, además tenemos la posibilidad de escribir observaciones referente a cada ítem en el caso de que fuera necesario.



 

Motricidad: Ítems.

 

Lo consigue.

No lo consigue.

Observaciones

 

Se quita el pantalón, la ropa interior y los zapatos.

 

 

 

 

 

Realiza los movimientos a la vez que su pareja o grupo.

 

 

 

 

 

Conoce las posibilidades de movimiento de algunas partes de su cuerpo.

 

 

 

 

 

Muestra destrezas motoras y habilidades manipulativas.

 

 

 

 

 

Mejora la precisión de movimientos.

 

 

 

 

 

Desarrolla progresivamente la motricidad fina.

 

 

 

 

 

Mejora la coordinación y el control de las habilidades manipulativas de carácter fino: recortar, modela, realizar laberintos.

 

 

 

 

 

Realiza sus primeros trazos.

 

 

 

 

 

Comienza a sonarse la nariz y se limpia con un pañuelo.

 

 

 

 

 

Baja las escaleras con ayuda.

 

 

 

 

 

Corre.

 

 

 

 

 

Mantiene el equilibrio.

 

 

 

 

 

Se levanta sin usar las manos.

 

 

 

 

 

Lanza la pelota con las manos.

 

 

 

 

 

Salta con los dos pies.

 

 

 

 

 




 

 

Relaciones con los demás: Ítems.

 

Lo consigue.

No lo consigue.

Observaciones

 

Conoce y utiliza el lenguaje gestual para comunicarse con los demás.

 

 

 

 

 

Identifica y reconoce los grupos más cercanos de su entorno.

 

 

 

 

 

No molesta a sus compañeros durante el sueño.

 

 

 

 

 

Aceptar las normas de comportamiento establecidas durante las comidas, los desplazamientos, la higiene y el descanso.

 

 

 

 

 

Saluda al entrar y al salir de la escuela.

 

 

 

 

 

Pide las cosas por favor.

 

 

 

 

 

Da las gracias.

 

 

 

 

 

Presta atención cuando se le habla o habla otra persona.

 

 

 

 

 

Acepta y juega con todos sus compañeros sin discriminar a nadie.

 

 

 

 

 

Manifiesta afecto hacia los demás.

 

 

 

 

 

Comparte con sus compañeros.

 

 

 

 

 

Juega con la educadora.

 

 

 

 

 

Muestra preferencia por el juego en paralelo

 

 

 

 

 

Participa en las actividades del aula.

 

 

 

 

 

Respeta los turnos.

 

 

 

 

 


 

 

Conocimiento de sí mismo: Ítems.

 

Lo consigue.

No lo consigue.

Observaciones

 

Identifica correctamente a las diferentes partes de su cuerpo y conoce su función principal, (la cabeza, la cara, las manos, el tronco), además las identificarlas y señalarlas.

 

 

 

 

 

Es capaz de identificarse como niño o niña.

 

 

 

 

 

Identificar algunos colores: rojo, amarillo, azul.

 

 

 

 

 

Controla el esfínter durante el día.

 

 

 

 

 

Reconoce los utensilios de la comida.

 

 

 

 

 

Identificar los sentimientos y las emociones.

 

 

 

 

 

Realizar autónomamente y con iniciativa actividades habituales para satisfacer necesidades básicas.

 

 

 

 

 

Aumenta el sentimiento de confianza en sí mismo.

 

 

 

 

 

Reconoce su nombre.

 

 

 

 

 

Muestra autonomía y responsabilidad en la realización de actividades y tareas sencillas.

 

 

 

 

 

Adquirir hábitos relacionados con la higiene, la alimentación, el vestido, el descanso y el cuidado de la salud.

 

 

 

 

 

Identificar algunos objetos relacionados con el aseo, el vestido y la alimentación.

 

 

 

 

 

Contribuye al mantenimiento del orden y la limpieza de los espacios donde se realizan actividades relacionadas con la higiene, la alimentación, la clase…

 

 

 

 

 

Solicitar ayuda cuando lo necesite.

 

 

 

 

 

Mejora su capacidad de atención.

 

 

 

 


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